Uno de estos, ¡y a programar! |
Aunque todo esto de arriba suena bastante generalizado y en parte, incluso sesgado (no hablemos ya de incongruencias con las fechas, sirva únicamente como modo de visualizar el tema), no es menos cierto que parece que hayamos vuelto a los orígenes de la creación de los videojuegos, cuando cualquiera (entiéndase ese 'cualquiera' como alguien capacitado para ello claro) podía crear un juego en su casa con un par de amigos y tentar a la suerte de las distribuidoras del momento para forrarse, o al menos intentarlo.
Nitronic Rush, un proyecto de estudiantes del DigiPen |
Desde hace unos años vivimos inmersos en un panorama inmenso y prácticamente inabarcable. La gran cantidad de sistemas diferentes, las plataformas de descarga digital, la escena indie más fuerte que nunca, la rotura del modelo de negocio continuista de la industria, el amor por lo retro, los kits de desarrollo para ordenadores y consolas viejunos, la ilusión de toda una generación por recuperar recuerdos olvidados... Todo esto comprende un conglomerado increíble y gigantesco, que lleva dando sus frutos un tiempo y que parece estar a punto de explotar en cualquier momento, como gritando al mundo que se empeña en volverle, ignorante, la cara: "¡Hey!, ¡Miradnos, estamos aquí!".
Jamestown para Windows y Mac. ¡Tremendo! |
No es que los triple, cuádruple y quíntuple AAA creamos que sean una mierda, estén pasados de moda y nosotros vayamos de modernitos por la vida haciéndoles un aparte. No, el asunto es que la forma de disfrutar los videojuegos se ha expandido exponencialmente y por fortuna están al alcance de todos nosotros con muy poco esfuerzo. Tampoco es que vayamos a criticar la manera habitual de consumir este ocio electrónico, pagando religiosamente 60 eurazos a la productora de turno por la última novedad de la desarrolladora puntera. Esto forma parte de nuestro 'hobby', pero si abrimos nuestra mente un poco más allá, nos enriqueceremos enormemente descubriendo un 'universo paralelo' inabarcable e infinito que esconde muchas sorpresas, y todos deberían tener cabida en el jugón que se precie como tal.
Spelunky ofrece diversión ilimitada |
El paradigma de todo esto es la escena independiente. Pueden ser pequeños estudios de un par de tíos, cinco, o hasta diez entusiastas si nos apuráis, que pasan del sistema preestablecido, no obedecen leyes de productoras, y ni mucho menos se rinden ante las distribuidoras. Su objetivo también es ganar pasta con su trabajo, obviamente, pero se atreven con nuevas ideas, innovan de verdad, proponen nuevas estéticas, dan rienda suelta a su imaginación en un ejercicio poderosísimo de originalidad, y en un chorreo de creatividad que seguramente no podréis ver en casi ninguno de esos "triple-A" que hablábamos antes. Son un soplo de aire fresco entre tanto estándar preestablecido. También podréis disfrutar con aquella recuperación de viejos valores y estéticas de las que hablábamos antes, utilizada o bien como recurso del diseño, o bien para atraer descaradamente a toda una generación de jugones que rondan o superan la treintena a sus espaldas.
El remake de R-Type para CPC realizado por un grupo de entusiastas |
Títulos como Jamestown, DustForce, Resonance, Super Meat Boy, Spelunky, FEZ, Lone Survivor, Oniken o los futuros Super TIME Force o Fist Puncher en XBLIG,... son juegos independientes que tratan de ganar su dinerillo, haciendo lo que les gusta y sin depender de terceros, a veces dándole una vuelta de tuerca a las manidas mecánicas, otras sorprendiendo por su planteamiento. Y por otro lado está la escena indie por 'amor al arte', donde encontramos auténticas joyas desinteresadas que desgraciadamente se quedan en muchas ocasiones en el olvido, por su incapacidad para hacerse un hueco entre tanto maremágnum de noticias y productos comerciales. Los títulos de Locomalito, imprescindibles, las locuras de Cactus, el surrealismo de Anna Anthropy, los remakes multijugador de Kotai, el acabado de los trabajos de Daniel Remar, ¡son imprescindibles! Y no nos metemos en los juegos flash, los títulos para móviles o la escena doujin japonesa porque no terminaríamos nunca, pero echadle un vistazo a La Mulana, Cave Story (las versiones originales) o Rokko Chan por ejemplo.
La Mulana, el paradigma de las aventuras para MSX en tu PC |
Y un poco más allá están todos esos 'locos' que nos retrotraen a tiempos pasados programando videojuegos para plataformas extintas, desde el Spectrum hasta la consola Jaguar de Atari, desde NES hasta Megadrive. The Mojon Twins, Relevo, Retroworks, en España despuntan por la calidad y cantidad de sus producciones, sobre todo para microordenadores de 8 bits, pero 'fuera' nos encontramos también con auténticos gurús en esto de sacarle partido al ensamblador y los sistemas viejunos como Sivak con su Battle Kid 2 para NES, Easter Egg y su impresionante conversión de R-Type para Amstrad CPC, la gente del NG:DEV Team con Gun Lord para NeoGeo, el esperado Sturmwind de Duranik para Dreamcast, WaterMelon y su increíble RPG Pier Solar para Megadrive... Algunos gratuitos, otro no, la mayoría de estos juegos tienen salida en formato físico por lo que entran a formar parte del imaginario global de todos aquellos que no queremos olvidarnos de nuestro pasado, ya que los videojuegos, ¿en caja? mucho mejor...
Pier Solar para Megadrive está muy cuidado |
Al final lo que tenemos delante de nosotros es un escenario inmenso, una elección masiva sean los que sean vuestros gustos en la que no hace falta discriminar nada. ¿Qué lo vuestro son las súper producciones? No dejéis de echarle de todas formas un vistazo a los pequeños trabajos indie. ¿Qué lo que os gustan son las tradicionales videoaventuras para Spectrum? Quizás Super Crate Box para móviles también te ofrezca algo nuevo. ¿Qué prefieres la originalidad y el surrealismo? Puede que las mecánicas tradicionales también le sienten bien a tu mente.
En fin, que menudo momento más dulce nos ha tocado vivir a todos los que nos gustan los videojuegos, que se entere todo el mundo y que ojalá no termine nunca...
+1000 a todo lo escrito en el artículo ;D
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