Impresiones con 3D Classics Kid Icarus para 3DS

Esos dos son unos puñeteros. Escuchadnos bien...

Si recordais, hace unas semanas os hablábamos de la iniciativa de Nintendo de regalarnos una nueva encarnación de la colección '3D Classics', o lo que es lo mismo, videojuegos antiguos de NES (por el momento) pasados por el filtro de profundidad en 3D de la consola. El último de los títulos en añadirse a dicha colección es ni más ni menos que Kid Icarus, seguramente para ir allanando el camino de su esperada reaparición en 3DS tras continuos retrasos en Kid Icarus Uprising, pero esa es otra historia.

Con todo, el pasado jueves Nintendo cumplió su palabra y envió los códigos de descarga del juego a todos aquellos que habíamos registrado en su web dos de los juegos elegibles para dicha promoción, así que ni cortos ni perezosos lo descargamos y sólo os podemos decir que llevamos un par de días enganchados llenando los huecos del día con el dichoso jueguecito.

Los enemigos acuden en oleadas

¿Qué no sabéis de que va el Kid Icarus original? Básicamente se trata de una divertida mezcla entre shooter de toda la vida y plataformas vertical. Encarnando al pequeño Pit tendremos que "escalar" los diferentes niveles hasta llegar a la puerta de salida de la fase en cuestión situada en lo más alto. Para ello tendremos que saltar de plataforma en plataforma, eliminar oleadas de enemigos, hacernos con corazones, comprar items, etc. Lo mejor de todo es que este título de NES nos lleva directamente al pasado, donde morir era bastante más fácil que ahora, y la barra de energía no se restituye por la patilla (menudo invento).

Siempre tendremos que andar con un ojo puesto en nuestro medidor de salud si no queremos ver como aparece en pantalla el temido mensaje de "I'm finished", y tendremos que aprender las mecánicas y movimientos de los diferentes enemigos a los que nos enfrentamos para poder eliminarlos sin sufrir en exceso. Recoger los corazones que van dejando es más que necesario, ya que son la moneda de cambio para obtener mejoras en determinadas tiendas que nos encontraremos diseminadas por los niveles. Ojo a estas tiendas, porque los precios son variables por cierto.

Perdona señor, ¿no me lo pondría más baratito?

La dificultad principal estriba en que el scroll vertical de la pantalla es de un sólo sentido, hacia arriba, así que si os caéis y no hay plataforma bajo vuestros pies, no llegaréis al fondo del nivel, si no que directamente será un 'kaput' en toda regla. Además los bordes laterales de la pantalla se interconectan (si desaparecéis por la derecha, apareceréis por la izquierda y viceversa siempre que no exista un obstáculo), algo que será imprescindible que dominéis para superar determinados tramos de algunos niveles. En líneas generales la dificultad del juego es alta, y llegar hasta el primer jefe final os costará más de lo que podríais esperar en un principio, aunque contamos con la ventaja de que podemos guardar la partida por cada nivel que superemos.

Técnicamente sigue siendo un juego de NES, y aunque fuimos bastante escépticos la primera vez que hablamos de esta conversión por haber añadido unos fondos de estridentes colores, debemos recular y reconocer que el añadido con respecto a la versión original no le queda nada mal. La principal novedad, claro está, es el efecto de profundidad en 3D. ¿Qué tal ha quedado? Pues francamente bien, y al igual que en algunos títulos más modernos para la consola, podemos seleccionar por software un nuevo nivel de efecto al mismo tiempo que deslizamos el selector de la consola. Los planos se diferencian de forma excelente y resulta curioso comprobar como todo cobra una nueva "dimensión". Sin embargo, creemos que esto no deja de ser más que una mera curiosidad, que no afecta para nada al juego, y que es probable que terminéis por desactivar para disfrutar del juego sin más.



De momento este 3D Classics Kid Icarus no está disponible para descarga en la e-shop a no ser que participes en la promoción de Nintendo (hasta el 31 de enero), pero a partir del mes que viene lo encontrarás seguramente. ¿Merece la pena? En parte sí, desde luego, es un título divertido, adictivo y con un punto de dificultad que ha desaparecido en los juegos actuales. Es también un excelente anticipo de lo que nos esperará en Uprising, y la verdad es que nos ha abierto el apetito. ¿Para cuando el cartucho de GameBoy? :)