From Dust, lo último de Eric Chahi a punto

Eric Chahi es un tipo tranquilo con una "juegografía" algo escasa pero que se justifica por si misma con sólo dos títulos: Future Wars y Another World. El primero una original aventura gráfica de 1990 obra de Delphine Software y en la que Chahi contribuyó con sus refinados gráficos, y el segundo una obra de arte en si misma, desarrollada durante dos largos años únicamente por el propio Eric en un estilo muy similar al que había seguido Jordan Mechner para programar su Prince of Persia. La gloria le sobrevino al francés gracias a Another World y todas sus conversiones, pero no tuvo tanta suerte con el posterior Heart of Darkness, debido sobre todo a sus continuos retrasos y promesas no cumplidas, llegando muy tarde al mercado y pasando prácticamente desapercibido debido al auge de los juegos en 3D y los polígonos de finales de los 90.

Ahora, y tras casi 15 años sin traer ningún título nuevo (si exceptuamos la actualización de Another World para ordenadores 'modernos'), Chahi vuelve a la carga con From Dust, una especie de mezcolanza entre las virtudes que atesoraban los famosos 'god games' que tanto gustaron en su momento. Populous, Powermonger, Dungeon Keeper o Black & White son claras influencias de lo que nos puede esperar este próximo 27 de julio cuando el juego aparezca bajo la batuta de Ubisoft en plataformas de descarga de consola y para PC (Steam).

En From Dust tendremos que dirigir un tribu nómada a través de una especie de archipiélago repleto de peligros y obstáculos. Interviniendo en el escenario directamente, e incluso manejando algunos elementos esenciales como el agua, la lava o incluso el crecimiento de la flora en tiempo real, será prioritario que la tribu sobreviva a las continuas catástrofes que se les avecinan. El motor físico del juego parece que cumplirá con creces, y podremos ver como el terreno y las condiciones atmósfericas cambian ante nuestros ojos y modifican el escenario de forma radical.



Acutalmente existen pocos títulos que tengan estas características tan marcadas. En esencia no parece ser un god-game como Populous, han pasado muchos años desde aquel viejo título, pero en la evolución del género si que parece haber sido respetada aquella fórmula que tan buenos ratos hicieron pasar a muchos jugones a lo largo y ancho del mundo.